Las temperaturas bajan y la luz se vuelve menos intensa como toca en otoño, también el secador natural de la naturaleza -el viento- ha hecho acto de presencia en muchos lugares. Poco a poco el campo se llena de todo tipo de colores, formas y texturas en forma de hongos y setas, la magia de las setas vuelve a despertar.
Ya están aquí, los hongos y setas han empezado a salir en buena parte del país: boletus, níscalos, perrochicos, setas de cardo, rebozuelos, colmenillas, amanitas cesáreas, senderillas, llanegas o mocosas, capuchinas, fredolics, champiñones silvestres, trufas…
Acercándonos a la naturaleza aprendiendo los principales elementos más destacados de cada estación, y como cada otoño también saldremos para aprender las hierbas antes de que llegue el frío invernal y descubrir principalmente los usos de frutos, flores, brotes y germinados, en zonas principalmente de costa.
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